Salí sobre las 6:10 de la mañana del hotel donde nos alojábamos, que estaba a 1.3 km de una de las esquinas del parque subiendo por la 8th avenida. Lo primero que hice fue localizar el camino que da la vuelta entera al parque, muy fácil de encontrar, ya que es una calle ancha con carril bici y carril para runners. su longitud es de unos 10 Km aproximadamente y da toda la vuelta al parque. Quede gratamente sorprendido por la gran cantidad de gente corriendo que había a esa horas de la mañana, grupos de gente, niños con su padres, ciclistas..., fue una experiencia única dar la vuelta a uno de los parques más famosos del mundo, correr con tanta gente distinta pero a la vez tan igual a tu, unidos por el running.
El segundo día salí sobre las 6:40 del hotel, hice el 1.3 km hasta el parque y una vez allí decidí hacer un entrenamiento más corto pero más intenso, y me dirigí a coger el camino circular hasta llegar al Jacqueline Kennedy Onassis Reservoir, el lago más grande que hay en el parque, donde aparece la típica imagen del corredor neoyorquino corriendo en Central Park, lo bordeé y luego empalme otra vez con el camino circular, y volví hacia el hotel.
Fue corta la experiencia pero necesaria como runner que soy, es muy recomendable llevarse las zapatillas dentro de la maleta si te vas de viaje, es una forma de conocer mejor la ciudad o sitio donde vas, y con solo una hora ya basta, y lo recordarás toda la vida, al menos yo lo haré.
Aquí os dejo una foto de un día de paseo, los días que fuí a correr no me lleve la cámara.
Saludos y Run & Run
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